APOYO A MUJERES Y JOVENES, PLACEVO GUBERNAMENTAL

Desde hace 40 años, tengo 47, escucho la misma cantaleta, la mujer primero………….. niños y mujeres primero…….. primero las damas……….. a un mujer no se le debe tocar ni con el pétalo de una rosa etc… Sin embargo en el camino he hallado mujeres golpeadas por hombres celosos, borrachos, neuróticos, prepotentes…………. Se invitaba a los hombres a civilizarse y no golpear a las mujeres, campañas para que a las mujeres no se les maltrate en el trabajo, han nacido instituciones que “velan” por erradicar ese maltrato. Ahora a últimas fechas hay camiones especiales, en el metro hay furgones especiales “solo para mujeres”. Eso en la Ciudad de México, porque en otros Estados de la República seguimos siendo ignoradas. No hay cifras fehacientes que demuestren en comparación con otras entidades, que en el Distrito Federal el índice de maltrato hacia la mujer haya bajado, por su puesto se tendrían que tomar estadísticas de años anteriores, más o menos desde que empezaron este tipo de campañas en contra de la violencia hacia la mujer y por supuesto la niña.

Pero volviendo a la vida real, a la vida en donde no todas las mujeres tienen acceso a esos centros de apoyo, ya sea porque no quieren denunciar, porque van a denunciar a un tipo que la maltrata a una y sale maltratada por otro tipo o tipa y que además son encubiertos por el resto de los trabajadores. O en su ignorancia se quedan con que la ropa sucia se lava en casa, ya que las instituciones no van dónde las mujeres si no a donde hay otras instituciones y suponen que ahí van todas las mujeres. Esto ocasiona, no que el maltrato se sigua sucediendo, si no que la información no fluya a no ser que sea EL DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER, o sea, cada año y por lo tanto, el resto del año la norma, para muchas sigue siendo “la ropa sucia se lava en casa”. Ya que no todas las instituciones se enteran a través de otras instituciones de casos de maltrato femenino, porque esas otras instituciones no se toman en serio su papel de canalizadoras y lo dejan en una simple rencilla familiar. O simple y sencillamente no se preocupan por preguntar, no hay un programa que incluya calificar la conducta familiar del niño en “problemas de disciplina” simplemente se llama a los padres, se les hace firmar una boleta, se les regaña junto con los hijos y se esperan mejores resultados. El Estado sigue manteniéndose alejado de la gente, no le importa saber porqué tal niño ha bajado de calificaciones, “hay que ponerle otro maestro o dejarlo estudiar por más tiempo”……………. Pocas, muy pocas, al lado de los millones de personas que somos, son las que son atendidas en los centros. Sin ser estadística ni mucho menos pero es en promedio de 1 mujer atendida de cada 50, y esa atención no se sabe si llega a un final feliz o por lo menos fuera de peligro y con posibilidades para esa mujer. No se les da seguimiento. Resulta que esa única mujer de en medio de 50 es atendida además porque insiste en recibir atención, porque denuncia y a las otras pobres 49 no se les atiende porque no la buscan, aunque se enteré la institución que vive bajo un régimen machista y golpeador, que sus hijos presentan síntomas de abandono y bajan sus calificaciones, mientras no los lleve al extremo de la muerte, es pasable. Pero si esta mujer no denuncia, no se puede hacer nada, por el contrario se estaría atentando en contra de sus garantías individuales y su libertad, o sea, si ella quiere que la sigan golpeando ya no es asunto del Estado, queda en el ámbito personal. Muy necesario es que las autoridades comprendan que uno de problemas mentales que acarrea la violencia, tiene que ver con una depresión profunda en la gran mayoría de los casos, depresión que lleva a la mujer a seguir viendo como normal ese estilo de vida. Necesario es que intervengan. O acaso estarán guiándose por las leyes de la selva, donde el más fuerte es el que sobrevive? Ahora por el lado de la burocracia, este tipo de ayuda, tiene también sus bloqueos; la mujer puede requerir hacer un trámite judicial, un juicio, para que sea atendida, pues las leyes no ven, son ciegas en cuanto interviene un tercero, aunque ese tercero sea el que esta infringiendo el abuso, por ejemplo, a una señora de la tercera edad, su hijo la maltrata, ella ha pedido que este se vaya de la casa familiar, el padre ha muerto y dejo como herederos al hijo y a la madre, pero entonces como el hijo es heredero la ley no lo puede echar, aunque la madre haya ido a interponer una denuncia en su contra, por la razón de que es heredero. Entonces hay que esperarse y/o convencer al hijo por la buena a que ya no maltrate a su madre o a que se venda la casa…………… como si eso sucediera de inmediato. Por lo mientras la señora o se aguanta a vivir con el hijo o se va a vivir a otro lado y si vive con él lo más seguro es que los maltratos continúen y en otra casa, lo más seguro es que haya maltratos. Entonces ahí, hasta la misma institución que “vela” por la mujer no puede hacer nada, porque la ley dice……………..

Lo mismo pasa con los jóvenes, si un joven se acerca a las instituciones, entonces será atendido, si no, la institución no lo puede seguir pues atentaría en contra de su libertad, aunque ese joven se pase la mayoría del tiempo en la calle y sin hacer nada, se este drogando o esté drogado todo el tiempo, mientras no delinque, porque lo que hace el Estado en ese caso es recluirlo por tiempo indefinido en un Centro de Readaptación, si es menor o un Reclusorio, si es mayor de edad. Ha pero si tiene capacidades, si es brillante, ya sea en el estudio o en el deporte, lo pueden becar y conseguir un mejor futuro. Si no es brillante, si no se esmera entonces el único futuro que le queda es seguir en las calles sin hacer nada o delinquir, ingresar a las filas del crimen organizado y morir mutilado o descabezado, total que no es bueno para nada. Si es “burro” se le tacha como tal, se le desea lo peor para el futuro y se le deja que siga el curso de su pobre vida, no importa que sus calificaciones sigan bajando……… es un “irresponsable, bueno para nada, no se importa el, no le importa a nadie”, que se le ha visto en las calles orinándose por las esquinas alcoholizado o drogado, no importa, si la policía no lo ve drogándose no puede hacer nada, que ya golpeo a su mamá, a su hermana, a su hermano, a los vecinos?........... que lo denuncien, si la autoridad no lo ve, no puede hacer nada y como esos golpes no son de más de quince días de curación menos puede hacer nada. Y se vuelve a lo mismo que con las mujeres, se salva solo aquel joven, activo, inteligente y decidido a dejar esa mala vida, aquel que no lo hace, ahí se queda. Pero adultos retrógrados que se creen con poder porque tienen un titulo y unos años comiendo del gobierno, les ponen el mote de “NINIS”, aparte de la marginación social a que son objeto, los margina ahora la misma ciencia, la que debe de ponerse a sus pies para salvarlos del hoyo, la que debe de insistir que los rescate el Estado la que debe de velar por salvaguardar sus derechos, los aplasta con un sobrenombre muy estudiado, un sobrenombre que tardaron muchas tesis y análisis antropológicos para encontrarlo. Ahora se los devolvemos, que los jóvenes les llamen los intelectuales “NONOSJO” no pienso, no actuó, solo jodo. Se repite el consejo de las mujeres al Estado, cómo quieren que los jóvenes quieran pedir ayuda, si están sumidos la mayoría en una depresión profunda, por el maltrato que de seguro han sufrido desde niños? Por el abandono institucional del que se habló antes que es lo mismo que el maltrato por parte del gobierno? Que no sean los sobresalientes los que se salven, que sean todos. O lo mismo que con las mujeres, es la ley de la selva la que prevalece en el Estado?

Estas realidades hacen ver las poquísimas acciones del Estado para salvaguardar estos sectores de la población como placevos, son una “medicina” mediática tanto para calmar al interior a la población nacional como al exterior a la población internacional, que por requerir estos avances solicita programas y acciones en este rubro. No necesitamos que ellos nos lo digan, en México se atenta gravemente en contra de los Derechos Humanos y las Garantías Individuales de las personas ya sean mujeres, jóvenes, niños, niñas, hombres, homosexuales, o personas de la tercera edad. Lo único que podría salvarte de esas situaciones de violaciones constantes, son o tu dinero o tus capacidades. Porque aquí se vive la ley de la selva.

Muchas, pero no imposibles, son las acciones que tendría que emprender el Estado para proteger realmente a TODA la población. Pero con una sola bastaría, pues esa única marcaría el comienzo de una nueva realidad, con ese comienzo se empezaría a sembrar en la mente, tanto del Estado como del Pueblo, la semilla de la JUSTICIA y con ella todas las demás se darían en cadena. Si el Estado de veras quisiera empezar de ceros, lo mejor que puede hacer para poner por encima a la mujer y a los jóvenes, sería revisar los casos, TODOS, de los que se encuentran recluidos en Centros de Readaptación Social, hacer de manera expedita su calificación, ver porque se avance en la tramitología. Mostrarlos ante la población, desde su origen, sus avances y la situación actual, hecha ésta para que deje la reclusión cuanto antes, de igual manera como se le va a poyar para que se inserte a la sociedad.

Por supuesto que lo más viable sería que desaparecierán este tipo de centros, pero ya con tanto años con este sistema podrido se tiene que empezar poco a poco para erradicarlos, así como empezar a humanizar todos los demás…………. Pero la pregunta obligada es………….. De verdad el Estado quiere beneficiar a toda la población o prefería seguir jugando al gato y al ratón en donde a final de cuentas el ratón sería él y el gato el PUEBLO.

Porque las revoluciones viven
Comuna en Ofensiva
Martinheli Jarillo Yáñez
Psicóloga Social